Como preparar ají de gallina

El ají de gallina tiene un origen colonial, llegando a Perú desde España como "Manjer blanc", un plato dulce con gallina, azúcar, nueces y arroz. En Perú, evolucionó incorporando ají amarillo y pecanas en lugar de azúcar y almendras. Desde 1839, este plato ha sido popular en Perú, adaptándose con ingredientes como leche, cebolla, huevo y papas, siendo preferido con pollo por la mayoría de los peruanos.

Preparación para 2 porciones.

INGREDIENTES:

• 1 pechuga de gallina o pollo con hueso
• 3 ajíes amarillos peruanos
• 1 cebolla de gran tamaño
• 3 dientes de ajo
• 1/2 taza de leche evaporada
• 4 mitades de nueces
• 2 paquetes de galletas de soda o 2 rebanadas de pan de molde
• 2 cucharadas de queso parmesano
• Sal al gusto
• Pimienta al gusto
• 2 papas cortadas en rodajas
• 4 aceitunas negras
• 1 huevo cocido

PREPARACIÓN:

1. El procedimiento inicial para preparar esta receta de ají de gallina implica cocinar la pechuga entera del pollo en una olla con agua, sin sal ni ningún otro condimento. Una vez cocida, se reserva el caldo y se deja enfriar la carne, que luego se desmenuza y se guarda.
2. Se prepara una pasta con los ajíes amarillos, retirándoles las semillas y venas, y licuándolos con un poco del caldo de la pechuga hasta obtener una textura cremosa. Esta pasta se reserva. Las nueces se muelen en un mortero y se reservan también.
3. Las galletas de soda (o el pan) se desmenuzan con las manos hasta obtener una textura similar a la del polvo y se reservan. En una sartén profunda, se sofríen el ajo y la cebolla previamente picados, hasta que la cebolla se vuelva transparente. Luego se añade la pasta de ají, se mezcla bien y se sazona con sal y pimienta.
4. En otro recipiente se mezclan las galletas de soda (o el pan) con un poco de caldo de la pechuga hasta obtener una masa espesa, que se añade a la sartén con el sofrito. Se incorporan las nueces molidas y la pechuga desmenuzada.
5. Se agrega una taza de caldo y se reduce el fuego para permitir que la mezcla se cocine durante un tiempo. Mientras tanto, se limpian y pelan las patatas, se cortan en rodajas y se cocinan al vapor o hervidas hasta que estén tiernas, para usarlas al final al momento de servir.
6. Transcurridos unos minutos, se añade el queso parmesano y se cocina por otros minutos más. Se ajusta la consistencia del ají agregando más caldo si es necesario, o más queso si está muy líquido.
7. Pasados aproximadamente 10 minutos desde que se redujo la temperatura de la cocina, se retira del fuego, se añade la leche evaporada y se mezcla bien. Se sirve caliente y está listo para disfrutar.